REFORMA DEL ESTADIO (Capítulo 12) “Se empiezan a notar los cambios”

Desde el mes de enero no he escrito nada sobre la reforma del estadio y creo que ya va siendo hora. Para los que os habéis incorporado últimamente al blog, deciros que este es el décimo segundo capítulo de una colección a la que podréis acceder si en el margen superior izquierdo, en el índice de temas, pulsáis en la pestaña “El Sadar, nuestra casa”

En estos seis meses en los que no había escrito nada sobre este asunto la verdad es que tanto el estadio como tal, así como los aledaños, han experimentado un cambio brutal.

Somos muchos los aficionados que a lo largo de estos meses hemos ido bien paseando o en nuestro automóvil hasta los aledaños del estadio para ver insitu el desarrollo de las obras y la verdad es que cuando uno va, siente un cosquilleo adornado con el deseo de que podamos entrar cuanto antes en su interior para saborear y disfrutar del cambio que está experimentando nuestra casa rojilla.

Si alguno lleva tiempo sin pasearse por allá decirle que la fachada del estadio ya tiene otra cara. La nueva altura del estadio en grada lateral, graderío sur y tribuna gol ya es una realidad y las cubiertas del estadio ya han pasado a mejor vida. Así mismo la nueva altura conlleva que se haya ampliado el recinto y que el Sadar se haya prolongado unos metros hacia fuera.

Se han instalado 80 nuevos pilares de cemento que son los que sostienen la estructura del nuevo graderío. Se han empleado unos 800 metros cúbicos de hormigón y 100 toneladas de acero por mes.

En estos meses hemos visto, a parte de la retirada de la techumbre y la instalación de los pilares que he mencionado con anterioridad, la instalación de las estructuras metálicas sobre las cuales han comenzado a ponerse las gradas y la instalación de nuevas escaleras de acceso ofreciendo de esta forma mayor seguridad al aficionado. Todos estos elementos (estructuras metálicas, gradas y escaleras) han sido elaboradas por la empresa Proerai en Alsasua. Allá las hacen, las traen en camiones y las instalan en el estadio ayudados de grúas gigantes.

Hay que anotar que se han trastocado parte de los planes inicialmente previstos y se han desarrollado modificaciones sobre el primer proyecto. Por ejemplo y lo considero un acierto, se va a cambiar por completo la cubierta de la Tribuna Alta y dicha cubierta va a tener continuidad con el resto del estadio. La verdad es que es una buena propuesta porque los años no perdonan y la techumbre del estadio necesitaba una reforma en su totalidad ya que existían muchas filtraciones de agua que conllevaban que Osasuna tuviese que acometer todos los años obras de mejora ya que se producían muchos daños.

La modificación de la techumbre en Preferencia va conllevar que el techo del estadio quede uniforme en todas sus partes y por lo tanto muchísimo más elegante. Una pena en cambio que la altura de gradas no alcance la misma altura que la actual grada de Preferencia puesto que el campo iba a quedar muchísimo más bonito.

Respecto a la retirada de la cubierta hay que anotar que no ha estado exenta de complicaciones ya que dicha retirada conllevaba problemas con la iluminación del estadio. Cabe recordar que en la techumbre de la grada Preferencia estaban instalados bastantes focos y obviamente, al retirar el tejado, hubo que buscar otra ubicación a estos ya que en caso contrario no se cumplían los requisitos para la retransmisión de los encuentros. La solución que se dio para solventar esta dificultad fue la instalación de unos andamios provisionales delante de las cabinas de prensa. En el caso en que la L.F.P. no hubiera aceptado la solución dada por el club, se hubiese tenido que pensar en buscar un campo donde disputar los partidos que le restaban al equipo como local, ya que las instalaciones de Tajonar no recibieron el visto bueno de los dirigentes federativos. Al final, como es sabido por todos, el máximo organismo federativo aceptó la solución dada por el club rojillo y los encuentros han podido disputarse en el Estadio del Sadar.

Respecto al graderío hay que anotar que también se va a realizar algún cambio que inicialmente no estaba previsto. Tanto en Grada Gol, Grada Lateral como en Graderío Sur, se va a renovar la idea inicial dando continuidad al graderío y haciendo desaparecer uno de los pasillos que actualmente hay. Así pues los aficionados entrarán al estadio a través de las bocas de acceso por las que en la actualidad se accede a las tribunas y de ahí bajarán a la grada hasta ocupar sus localidades. Esta modificación va a traer consigo el hecho de que se aumente el número de metros cuadrados que está previstos dedicarlos a locales comerciales. Concretamente se van a ganar 1.868 metros cuadrados más de los que inicialmente estaban previstos (en norte 606 en lateral 728 y en sur 534).

El tema de los locales comerciales es un asunto importante puesto que estos espacios van a generar que Osasuna multiplique sus ingresos y haga que el club no dependa única y exclusivamente de la actividad deportiva. Otro asunto es que el Sadar sea una zona apetecible para el desarrollo de la puesta en marcha de nuevas actividades comerciales.

Además de los asuntos anteriormente mencionados hay que recordar que se cambiaron los vestuarios y los asientos de Preferencia, asunto que inicialmente no estaba previsto.

Obviamente estas modificaciones que no estaban en el proyecto original, van a conllevar que la obra presupuestada inicialmente en 16 millones de euros, sobrepase ahora los 18. Este aumento de presupuesto al no estar contemplado en el proyecto inicial ni en los requisitos planteados en el concurso, serán asumidos por Osasuna.

Ya que estoy tocando asuntos económicos, comentar que el Gobierno de Navarra ha decidido dejar sin efecto temporalmente la condición del aval en la que se obliga a Osasuna a amortizar 3 millones de euros cada uno de los años que estuviese el equipo en Primera. Dicha concesión viene motivada por las circunstancias vividas en este final de temporada con la crisis del COVID19. Cabe recordar que Gobierno de Navarra concedió a Osasuna un aval de 23 millones de euros para acometer las obras del estadio y saldar deudas anteriores del club. En dicha concesión se recogía que Osasuna debía cada 1 de mayo amortizar 3 millones de euros cuando el equipo estuviera en Primera. Este año, por la crisis sanitaria vivida, a Osasuna le resultaba totalmente imposible asumir este compromiso por lo que Gobierno de Navarra ha autorizado que se posponga esta fecha.

Otro de los cambios que el aficionado notará en el remozado estadio, será la instalación de nuevos asientos, de los cuales 1.300 serán modelo "rail seat” y se instalarán en Graderío Sur. Estos asientos tienen un cierre especial para que el asiento se pueda plegar y el aficionado pueda ver el encuentro de pie. Así mismo dichos asientos cuentan con una barra anti avalanchas. Estas butacas se han inspirado en el mítico campo “Signal Iduna Park” del Borussia Dortmund con el famoso muro amarillo, que si alguno no lo conoce, le invito a que lo haga buscando imágenes del mismo.

Los asientos retirados se han regalado entre los clubes convenidos con Osasuna que los podrán colocar en sus instalaciones. Llama poderosamente la atención y no sé quién será el iluminado que ingenió la idea, el hecho de que en las instalaciones de Tajonar se hayan puesto 1.800 asientos de color azul, como si de las instalaciones del Getafe se tratara. Y yo digo, ¿no se podían haber puesto los rojos, que es el color del club, o mitad rojos y mitad azules?. En fin, que alguien me lo explique.

El curso que viene, otro de los cambios que sorprenderán al aficionado, será la instalación de una cámara aérea “Skycam”. Estas cámaras, que ya se utilizan en otros estadios, están sujeta por cuatro poleas que hacen que la cámara sobrevuele el estadio y pueda grabar imágenes aéreas de los encuentros.

Todos estos cambios y una vez que ha finalizado la liga, han conllevado la necesidad de retirar todo el césped del estadio con el fin de que las grúas puedan trabajar sin problemas. El césped será renovado unas semanas antes de que comience la próxima temporada y por ello Osasuna quiere solicitar que las dos primeras jornadas de la temporada que viene las pueda disputar lejos del Estadio de El Sadar.

Nuestro estadio va a cambiar en lo que a su estética se refiere y respecto a su capacidad, pudiendo albergar a 5.000 aficionados más. El campo pasará a tener 23.576 espectadores (en la actualidad el campo alberga a 18.375), un millar menos de lo que inicialmente se había previsto debido a cambios que se han ido haciendo en el proyecto por indicaciones dadas por los organismos competentes.

Veremos qué pasa con los plazos y si El Sadar está terminado para el 24 de octubre, fecha en la que se conmemoran los 100 años del club. Los vencimientos como tal eran de inicio tremendamente ajustados, el confinamiento ha trastocado los planes iniciales y de hecho hubo 15 días en el que las obras se paralizaron y los materiales suministrados por los proveedores no llegaron a tiempo. No obstante ha facilitado mucho en las obras el hecho de que el último tramo de la competición se haya disputado sin público ya que todo aquello que se pensaba hacer una vez finalizada la temporada, se ha podido ejecutar sin terminar esta. Estaremos atentos como va evolucionando la Pandemia y si esta puede afectar a las obras del estadio. Por ahora todo sigue su curso y los 80 trabajadores que están trabajando en las obras están pudiendo acudir a su puesto de trabajo sin problema alguno.

Gorritxo.