VERGÜENZA

Correr fuera de si tras un jugador rival al grito de “te voy a matar”: 1 partido de sanción (N’Diaye)

Sujetar al jugador anteriormente mencionado para que no cometa una imprudencia preguntándole si se da cuenta de lo que hace: 3 partidos (Xisco).

En el artículo que publicaba el pasado domingo, dedicaba unas líneas a hablar de este tema y comentaba que no acababa de gustarme lo que había hecho nuestro jugador, pero lo que jamás iba a pensar es que días más tarde íbamos a ser sometidos a este injusto atropello al que una vez más, y no es la primera, se ve perjudicado el Club Atlético Osasuna. Está claro que caro nos va a salir el no ser amigos de Fran Canal, el amigo de Tebas, porque es algo obvio que hay una mano negra, en las altas instancias del futbol, que no nos traga y nos trata de una manera indigna.

Desde el club se aclara que la culpa la tiene la redacción del acta por parte del colegiado, pero querida Junta… ¡defendamos a nuestro club y protestemos con indignación este atropello! ¡no nos quedemos de brazos cruzados! ¡Demos un golpe encima de la mesa!. Esto a todas luces es un atropello.

Yo me pregunto ¿para qué están el Comité de competición y el comité de apelación? ¿Para juntarse a comer y vivir del cuento? Porque independientemente de la redacción del acta, sancionar de una manera tan injusta y desigual, las imágenes que vimos todos, es algo que a uno a parte de enfadarle, le infundan serios motivos para pensar que Osasuna es incómodo en las altas instancias, no cae bien y cualquier oportunidad es aprovechada para hacerle mal.

Es verdad que tras la acción nuestro jugador se dirige al árbitro diciéndole “¿por qué cojones me expulsas?” pero aún estando eso mal ¿eso es más grave que el agredir a un jugador, algo que podía haber sucedido si Xisco no retiene al jugador malacitano? ¿Qué es lo que se supone que debemos hacer el próximo día? ¿Dejar que alguien le dé una paliza a un jugador ante 14.000 aficionados?. En fin, el futbol está loco, loco de atar. Y a uno, porque le gusta y es una apasionado de Osasuna, pero por estas cosas, mandaba a freír espárragos al futbol.

Llama poderosamente la atención como Alfred N’Diaye, tras la calma postpartido, pidió disculpas a todo el mundo afirmando que “no es un ejemplo para el fútbol ni para los niños”. Pues bien, para el comité de competición es muchísimo más grave no dejarle a N’Diaye matar a alguien, que haberlo hecho. Vamos, que aquello que nos enseñaban de pequeños de no pegarse y separar a los amigos si se pegaban, en el futbol no solo es una mentira, sino que es fuertemente sancionable si lo haces. ¡Nos estamos volviendo locos de atar!

Todo esto es una aberración, una casa de locos, o igual, todo es más sencillo, y lo que debemos hacer es que Sabalza se apunte a la ONCE, porque tras el encuentro el dueño del Málaga, el jeque Abdullah Al Thani, en twitter puso: “Árbitro del partido ciego”, además de diferentes fotomontajes ofensivos contra el colegiado. Por supuesto que eso no es ha sancionado. El jeque puede decir lo que quiera, no pasa nada con él… ya será fuertemente castigado el Club Atlético Osasuna.

Gorritxo.