ESTAMOS VIVIENDO UN SUEÑO

Retengan en su disco duro la actual temporada porque probablemente tardemos años en vivir algo semejante. Empezamos a tocar con la punta de los dedos la posibilidad de que en una misma temporada Osasuna sea campeón a falta de varias jornadas, suba el promesas a segunda B y las chicas asciendan dos categorías en un mismo año. Increíble pero cierto.

El fin de semana pasado estuve en el Sadar tanto el sábado como el domingo y les puedo asegurar que el lunes fue menos lunes.

Por primera vez en lo que llevamos de temporada fui inquieto a ver el Osasuna – Depor. Un cúmulo de circunstancias coincidían y no las tenía todas conmigo. En primer lugar teníamos enfrente, según Jagoba, a la mejor plantilla del campeonato. En segundo lugar con el colegiado Jorge Figueroa Vázquez Osasuna llevaba dos temporadas empatando. En tercer lugar hay una máxima en el futbol que reza “entrenador nuevo, victoria segura” y en el banquillo coruñés debutaba Jose Luis Martí. En cuarto lugar faltaban jugadores importantes como lo son Mérida, Iñigo y David y en quinto y último lugar, el “día de las peñas” tradicionalmente no ha estado ligado a una buena tarde futbolística y como se puede comprobar en la foto que acompaña a este artículo, los peñistas teníamos convocada nuestra cita festiva.

En fin, circunstancias ligadas muchas de ellas a las supersticiones pero que me hacían estar intranquilo. ¡Iluso de mi!. Se me había olvidado que Osasuna este año rompe cualquier estadística y lo más importante, que quizás no tengamos la mejor plantilla del campeonato, pero si el mejor equipo de segunda y es que Jagoba ha sido capaz de tener a todos enchufados y sacar lo mejor de sí de cada uno de los jugadores del equipo.

Arrasate, dada las ausencias, tuvo que innovar. Torres abandonó la banda para jugar por dentro y jugamos con dos extremos como a la antigua usanza. Además Rubén jugó de media punta y atrás la ausencia de David la ocupó Aridane, pero al final, independientemente de esquemas y jugadores, el resultado fue el de siempre: Osasuna se aupó a la decimotercera victoria consecutiva en casa con un sadar festivo que tuvo que poner por sexta vez en lo que llevamos de temporada el cartel de “no hay billetes”.

Osasuna tiene magia y es capaz de hacer posible lo imposible. Tengo la sensación de que el pasado sábado dimos una certera estocada, primero porque derrotamos a un rival de la zona alta y en segundo lugar porque nuestros inmediatos seguidores no son capaces de soportar el ritmo frenético que hemos impuesto.

Somos el equipo más fuerte de la categoría, con poderío, orgullo y que no pierde nunca el control de la situación.

Parecía que Osasuna podía estar un tanto flojo por haber perdido con el Tenerife y haber hecho malos partidos con el Rayo, Extremadura y Lugo pero luego hemos visto como el Tenerife empataba en Albacete, el Lugo ganaba 0 a 4 en Córdoba, el Rayo ganaba 0 a 2 en Coruña y el Extremadura ganaba en Málaga. En fin que no nos podemos quejar este año absolutamente de nada.

Sigamos soñando y divirtiéndonos. El equipo está en una dinámica inigualable gracias al esfuerzo, a la calidad que ostenta, a la piña que ha conseguido hacer el míster y a que mentalmente nos hallamos muy fuertes. Además cuando no estamos entonados, porque es difícil estarlo siempre, tenemos la suerte que muchas veces nos ha sido esquiva. En esta línea aun recuerdo el anecdótico saque de Rubén que golpeó el pasado sábado en el cuerpo de un jugador rival que se hallaba en el área y el balón volvió a las manos de nuestro guardameta.

No es cuestión de pensar si vamos a subir o no. La únicas dudas son en que jornada vamos a conseguirlo y si vamos a ser campeones.

Gorritxo.