ES NECESARIA UNA NUEVA POLÍTICA DE FICHAJES (PARTE 2)
El pasado lunes hablaba en
el blog de lo que para mi modesta opinión debe ser la política de fichajes del
club. Os decía que apuesto por una plantilla en la que se fiche poco pero lo
poco que se fiche sea de una calidad tan inmensa que sea obligada su presencia todos los partidos en el once titular porque marca la diferencia. Fichar muchos y
mediocres, que lo único que hacen es cobrar y ver los partidos desde la grada o
el banquillo, o fichar jugadores mediocres que juegan sin aportar nada al
equipo o al menos nada que no lo pueda hacer un jugador de la casa, es para mí
una horrible política de club, política que no contagia ni motiva a la grada.
No obstante yo no sé si por
las condiciones económicas del club, porque el socio está quemado o porque ha
existido una reflexión interna en el seno de la entidad, empiezo a observar
cierto cambio en la Junta Directiva de Osasuna.
De un tiempo a esta parte se
han producido movimientos:
Se ha renovado a Olavide
hasta junio de 2019 con una cláusula de rescisión de 5 millones. Tengo claro que
debe dejar el Sevilla y volver a casa (recordemos que Puñal se fue decido a
Leganés y luego se convirtió en uno de los jugadores más grandes de la historia
del club). Espero que el Sevilla no ejerza la opción de compra que tiene a
través de la cual abonando 3 millones y medio se hace con los servicios del
canterano rojillo.
También se ha renovado a Javi Martínez hasta junio de
2022 con una cláusula de 8 millones que pueden llegar hasta los 10 si se sube a
primera.
Por otro lado se ha conocido que el club está haciendo
esfuerzos en las categorías inferiores. Por ejemplo se ha atado hasta el 2020 a
Aimar Oroz, un centrocampista juvenil que
el año que viene militará en las filas del promesas. La cláusula de
rescisión es de 4 millones y si sube al primer equipo pasará a convertirse en 8
millones.
Que decir también de la renovación de Iván
Martínez, portero habitual de la selección española sub 16, hasta el 2021. La
cláusula de rescisión del guardameta es de 2 millones que se convertirá en 4 en
caso de que se empiece a pagarle el salario mínimo de la primera plantilla.
Otro jugador del juvenil al
que se le ha renovado ha sido al media punta Ilias Charid. Concretamente se le
ha renovado hasta el 2020, con una cláusula de 1 millón, aunque esta se
incrementará cuando el Club decida retribuirle el salario mínimo del primer
equipo, siendo de 5 millones en segunda y de 8 en primera.
También en juveniles se ha
atado al guardameta Yoel Ramírez, concretamente
hasta 2020 con una cláusula de rescisión de 2 millones de euros que ascenderá a
4 cuando pase al Promesas y a 8 cuando se le pague el salario mínimo de la
primera plantilla.
No se, quizás sean pequeños
detalles, pero el haber hecho una apuesta por estos jugadores es algo
importante, son pequeños pasitos para llegar a esa política de club que vengo
reclamando desde el lunes. Tengo claro no obstante que para el loco mundo del
fútbol las cláusulas firmadas, obviamente en consonancia con los sueldos, son
muy austeras, pero también entiendo que la economía rojilla es la que es y
menos es nada. El camino se emprende con pequeños pasitos y estos son claros
ejemplos de que algo diferente empieza a moverse. Igual estos ejemplos que he
ido poniendo son el inicio de un cambio de rumbo en la política de fichajes,
como lo ha sido el reciente convenio firmado con el Izarra a través del cual el
C.A.O. tiene preferencias sobre los jugadores estellicas. Tras ver como un
histórico como Oberena se ha alejado de Osasuna, el convenio de colaboración
recientemente firmado con el Izarra abre un halo de esperanza.
Confío que esto sea el
inicio de una nueva política necesaria y vital para reconducir el rumbo de
nuestro amado club.
Gorritxo.
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