ADIOS Y GRACIAS
Por buscar un aspecto positivo a la derrota del pasado
sábado en Valladolid, es que el equipo, antes ha conocido su futuro, y por lo
tanto goza de más días para planificar la temporada que viene (Como se puede
observar el que no se consuela es porque no quiere).
Y la primera decisión, en esta planificación de la
nueva temporada, no ha tardado en llegar y hoy a la tarde, la Junta Directiva,
junto con el Director deportivo y el Director General, han decidido prescindir
del entrenador rojillo Diego Martínez al cual le restaba un año más de
contrato. El míster, pese a esto, saldrá de la entidad cobrando solamente la
mitad del salario del año que le queda al no haber conseguido clasificarse para
los play off.
En el seno del club había disparidad de criterios. Hay
quien estaba a favor de su continuidad y voces contrarias a ello. A lo largo de
la temporada también han existido voces discordantes, si bien el Director
deportivo, Braulio y el Director General Fran Canal, lo han defendido en todo
momento.
Yo por mi parte, y como socio de la entidad, hago una
apuesta firme por su marcha. Me consta, porque así lo afirman fuentes cercanas
al club, que el míster ha sido una persona que ha transformado la manera de
trabajar del primer equipo y que se ha involucrado en toda la estructura del
club. Quien bien le conoce habla de que ha implantado nuevos métodos de trabajo y ha
estado tremendamente implicado en la entidad. Aun más, yo no descarto que en un
futuro triunfe en el mundo del futbol, tal y como le sucedió a Benítez cuando
abandonó el club rojillo y recaló a los años en el Liverpool inglés. Además hay
que anotar que Diego Martínez contaba con un buen cuadro técnico y a las
pruebas me remito con su preparador físico que es ahora preparador físico en el
mundial.
No obstante y a pesar de lo expresado en el párrafo
anterior, sigo pensando que su marcha es la mejor decisión que se puede tomar
en estos momentos. El objetivo marcado a principio de temporada le ha caído muy
grande y aun tiene mucho que aprender para llegar a ser un técnico de valía,
asunto que como decía anteriormente no descarto que llegue a serlo. Este año ha
fracasado estrepitosamente en el objetivo para el cual se le trajo. Contaba con
una plantilla llamada a cotas más altas que las logradas al finalizar el
campeonato liguero. Se hizo una fuerte inversión que
se concreta en 11 fichajes veraniegos y dos cesiones en el mercado invernal y el
resultado no solo ha sido más que decepcionante, sino que la imagen del
equipo en gran parte de la temporada ha sido penosa.
Diego Martínez se ha librado este año de una bronca
monumental porque estaba al frente de Osasuna, un club que se caracteriza por
tener una afición tremendamente paciente y que nunca le da la espalda al
equipo. Por poco que le des al aficionado rojillo, la respuesta es
espectacular. En otros clubes para hace ya muchísimos meses se hubiese pedido
la cabeza de Diego.
Además de lo anteriormente señalado, considero que el míster
no ha entendido la idiosincrasia rojilla y no ha contado apenas con el jugador
de la casa, al fin y a la postre el que acostumbra a sacar las “castañas del
fuego”.
El míster comenzó bien la temporada, pero rápidamente
el juego brillante, si así podríamos denominar al juego de principio de
temporada, desapareció y
con él los resultados. Si bien lejos del Sadar el equipo ha sacado los partidos
adelante, en casa la imagen ha sido penosa, algo que ha cansado y aburrido al
aficionado.
Todos recordamos esas tediosas tardes de
futbol que nos ha brindado este año en el Sadar el equipo mientras el
entrenador, en el mismísimo minuto 90 y con derrota en el marcador, se limitaba
a pedirle a sus jugadores con las manos: calma y que jugaran con cabeza. Un
entrenador que parecía que se comía el mundo de lunes a viernes cuando
respondía a los medios de comunicación pero que no contagiaba absolutamente
nada en los partidos, ni a su equipo, ni a la grada
Para terminar, Señores
de la Junta… Háganselo mirar… seis técnicos han
ocupado el banquillo rojillo en tan solo tres tres años y medio de mandato:
Urban, Mateo, Martín, Caparrós, Vasiljevic y Diego Martínez… De todos ellos
solamente la “Bruja de Campanas” ha cumplido objetivos y enganchado con el
aficionado. Creo que este dato les debe llevar a la reflexión.
Gorritxo.
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